Una breve historia del logo de la RUFA

Desde nuestro inicio en Roma, en 1998, la RUFA ha jugado un papel clave en la escena contemporánea. A lo largo de los años, se ha desarrollado una imagen corporativa que refleja nuestra identidad y valores fundamentales, junto con nuestro crecimiento y conciencia de marca.

Originalmente, nuestro logotipo presentaba una combinación de un huevo y una brújula; geométricamente, el logotipo consistía en un ovoide inscrito y centrado en el eje principal de una brújula de tornillo de mariposa abierta, en rojo y blanco, que sugería la planificación y el diseño. La elección de estos símbolos definía típicamente la marca de un establecimiento en el que la investigación artística se asociaba a la gama de disciplinas creativas: una brújula, símbolo del diseño profesional, combinada con una forma de huevo, que simboliza la creación y, por tanto, la creatividad. En el lateral del logo – que más tarde se trasladó a la parte inferior – el acrónimo de nuestra escuela.

En los años en los que la RUFA fue celebrada como una de las principales Academias de Italia, combinando los temas tradicionales con la experimentación, la innovación y el enfoque en la vanguardia, nuestro logo fue radicalmente revisado por Vértigo Visual Design (www.vertigodesign.it) que optó por una solución consistente en una versión estilizada de nuestro acrónimo dentro de un círculo rojo, las cuatro letras blancas haciendo eco de los conceptos de integración, conexión, modularidad, dinamismo y centralidad. El logo también incluía, en el lateral, el acrónimo de la escuela en mayúsculas y el nombre de la escuela completo en la parte superior/inferior.

El nuevo logotipo de RUFA, de hecho, se comunica también respondiendo a los estímulos sonoros y la sinestesia alcanza su punto culminante cuando se llega a ver los sonidos y a sentir los colores y signos generados por esta identidad visual, disfrutando un intercambio agradable y una inversión sensorial productiva.

El nuevo logo de RUFA es dinámico con una matriz generativa.
Prácticamente, consiste en una marca gráfica fija y estable – persistente pero no inmóvil -, con letras de acompañamiento que refuerzan su mutabilidad controlada. En este sistema dinámico, las letras se mueven y cambian, creando ondas y variaciones sonoras y visuales dentro del propio logo. Las variables generativas pueden cambiar cada vez: el número de estudiantes presentes en la Academia en un momento dado, el número de programas de estudio disponibles, el número de personas que participan en un evento. Los cambios en nuestro logo están estrictamente relacionados con la vida de RUFA y por lo tanto la propia RUFA generará su logo.

El nuevo logo de RUFA es dinámico con una matriz generativa.

Prácticamente, consiste en una marca gráfica fija y estable – persistente pero no inmóvil -, con letras de acompañamiento que refuerzan su mutabilidad controlada. En este sistema dinámico, las letras se mueven y cambian, creando ondas y variaciones sonoras y visuales dentro del propio logo. Las variables generativas pueden cambiar cada vez: el número de estudiantes presentes en la Academia en un momento dado, el número de programas de estudio disponibles, el número de personas que participan en un evento. Los cambios en nuestro logo están estrictamente relacionados con la vida de RUFA y por lo tanto la propia RUFA generará su logo.

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